El IV Congreso de la Unión Sindical Italiana

En Roma, durante los días 10, 11, 12 y 13 de Marzo, se han desenvuelto las sesiones de este Congreso que había despertado la expectación del movimiento Sindicalista revolucionario de todo el mundo y provocado agudas polémicas entre las distintas tendencias en Italia, por la importancia de los puntos a tratar. Los más importante sin duda, son los referentes a la Internacional Sindical Roja, al problema de unidad sindical, y a la cuestión de los diputados Faggi y de Victorio, secretarios de importantes Cámara del trabajo. Todos, los tres asuntos no eran en rigor, más que uno, puesto que tanto la propuesta adhesión a Moscú, como la unión con la Confederación del Trabajo y el consentimiento del mandato parlamentario de los dos dirigentes Sindicalistas, se involucran en una misma corriente desviadora del sindicalismo revolucionario. De cómo fuese la decisión del Congreso sobre uno de esos puntos, el de la Sindical Roja por ejemplo, dependía la decisión sobre los restantes. En efecto, la adhesión a Moscú significaba la disolución de la Unión Sindical Italiana y su entrada en masa en la Confederación del Trabajo, disolución y entrada impuesta por la política adoptada en el Congreso de la sindical Roja. Y la entrada a la Confederación significaba a su vez, el reconocimiento de los dos diputados que se aunarían a los tantos de que dispone la Confederación. Este Congreso de la U.S.I. había de decidir, pues, de la vida o de la muerte de esa organización, verdadera representación del sindicalismo revolucionario en Italia. Y en la alternativa, el Congreso se determinó, por una enorme mayoría, por la vida de la organización y por la reafirmación de sus principios, rechazando la unidad sindical, lo mismo que la adhesión a Moscú. Dos mociones en este sentido, la una menos incondicional que la otra, fueron rechazadas. En cambio, fué aprobada la siguiente resolución, que viene dar un formidable golpe más a la bamboleante Internacional Sindical Roja.

El IV Congreso de la U. S. I.:

Considerando que la U. S. I. ha desenvuelto constantemente, desde muchos años, su actividad en la reorganización internacional de todos los trabajadores, inspirándose en los principios de la I. Internacional; Constatando que la reorganización internacional, agrupando a todas las organizaciones sindicalistas revolucionarias no se ha podido conseguir por el carácter exclusivamente de partido dado primeramente a la III Internacional comunista, después a la Internacional de los, Sindicatos rojos; Reclamándose a los principios y a los métodos del sindicalismo revolucionario anticentralista y sostenedor de la absoluta autonomía de los sindicatos de los agrupamientos políticos; Resuelve (poniéndose en el terreno de la Confederación General francesa) adherir a la anunciada conferencia internacional de las organizaciones sindicalistas revolucionarias de todo el mundo para sostener los siguientes postulados fundamentales de la U. S. I, claramente contenidos en su propio estatuto desde su surgimiento, esto es:

1) Acción directa y revolucionaria de clase para la abolición del patronato y del asalariado; 2) Exclusión absoluta de cualquier ligamento con la Internacional Comunista y con cualquier otro partido o agrupamiento político y completa autonomía e independencia sindical de estos organismos de parte; 3) Exclusión de la Internacional Sindical de aquellos sindicatos o agrupamientos sindicales mayoritarios que adhieren a la organización amarilla de Amsterdam, aunque sea por el trámite de las Federaciones profesionales; 4) Limitación de la actividad y de la dirección de la Internacional Sindical a los problemas y a la acción de carácter internacional; 5) Ententes eventuales temporáneas con otras organizaciones sindicales y políticas proletarias, podrán ser establecidas, cada vez, para determinadas acciones internacionales de interés de la clase trabajadora. Tales postulados constituyen la condición esencial para la adhesión a la internacional de los Sindicatos Rojos de las fuerzas que se reunirán en la Conferencia de París. Fué igualmene aprobado el siguiente agregado: Y reclama qua el próximo Congreso de la I. S. R. en el que deben discutirse estas condiciones tenga lugar en el Occidente de Europa y que la sede del futuro Comité Ejecutivo de la Internacional Sindical Rojo, sea fuera de Rusia, aceptando, al mismo tiempo, la propuesta de la Confederación General del Trabajo de Francia, de tener una conferencia internacional sindicalista Revolucionaria para entenderse sobre los expuestos concepto.